El otro día recordaba la siguiente situación.
Yo comprando regalos para navidad.
Estando por primera vez en navidad, ante un ingreso que me permitiera hacer unos regalos de navidad a cada uno de mis seres queridos, me dirigí a un yopin.
-INICIO MODO NOSTALGIA-
Claro, en ese entonces vivía en un lugar con yopin incluído.
-FIN MODO NOSTALGIA-
Recorro y empiezo a ver las posibilidades que me permitía mi reserva monetaria.
- Remerita para papá
- DVD para hermano
- CD para mamá
Llego al momento de comprarle algo a mi sobrina y a mi cuñada, y aquí empieza la historia.
Aa mi sobrina le compro uno de esos patitos con manija y pedales (!) que vienen a reemplazar a los antiguos triciclos, y que serían una especie de triciclo/cochecito/andador/bicicleta que le vienen bárbaro al bolsillo de los padres modernos (y más si el que lo garpa es el tío... o sea)
Al llegar el turno de mi cuñada, decido que un par de sandalias sería un más que lindo regalo, así que entro a la zapatería.
Situación.
Yo, con 3 bolsas en las manos y empujando el patito con ruedas.
VENDEDOR: "Señor?"
YO: Ando comprando regalos para navidad"
VENDEDOR: "Y en qué le puedo ser útil?"
YO: Quisiera comprar un par de zapatillitas para el pato"
VENDEDOR: (Cara de noentiendounamierda)
YO: Sí... supongo que no calzará más que 38
Por supuesto que ante la continua cara de sorpresa del vendedor, tuve que sacar mi sonrisa del bolsillo antes que me denunciara...
Hasta el día de hoy me río de eso, y el tipo me debe tener en su podio de los 3 clientes más pelotudos de mi vida.
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