Ayer tuve una de las experiencias más abrumadoras de la vida de todo ser humano.
Pensaba en hablar de mi vómito cataratístico, pero me acabo de acordar que fui al supermercado, y eso es aún más escabroso.
Llego con la listita de lo que tenía que comprar (como buen comprador), y entro al super pero me olvidé de agarrar el carito en la entrada (como buen boludo), y como me dio fiaca salir a buscar uno (como buen pajero) supuse que iba a encontrar uno desocupado adentro (como buen cómodo), pero tarde me di cuenta que eso no pasaría (como buen argentino).
En ese momento pensé para mi interior: “No son tantas cosas, las cargo en la mano”
La suposición era cierta. Tenía que comprar 10 boludeces, pero las madres a la hora de hacer la lista, se encargan de que esas 10 boludeces pesen más que a bolsa del ano contranatura de la abuela a las 10 de la noche.
La lista era la siguiente
Como habrán podido notar, no era tan sencillo el asunto, así que empecé a eliminar cosas de la lista.
Primero: por qué mierda le tengo que hacer las compras a los vecinos. Si Don Milanesas quiere carne, que mande a su hijo que está bastante al pedo todo el día) a comprar.
Segundo: O mi padre le está metiendo bomba a mi madre demasiado seguido, o a la abuela se le taponó el ano contranatura, porque sino no me explico para ué mierda queremos tanta leche. Llevé 2.
Tercero: Fui a buscar la galletas de agua a la góndola correspondiente y no había, ya que con el frío se habían hecho cubito y las usaban para enfriar los freezeres para ahorrar energía.
Cuatro: Insecticida? Con el olor que tiene la abuela, mueren hasta los escorpiones!!! El otro día me fue a despertar a la mañana y se me murieron hasta los rokeros que tengo en los postres de la pared.
Cinco: El jabón en polvo era para la época en que el ahorro energético no existía. Mamá, lavá a mano. Llevé un jabón ODEX.
Seis: El precio de aceite es una locura, cuando llegué a la caja y pregunté:
- “Cuánto cuesta el aceite”
- “Una locura”
- “Alcanza con que me desnude, y me haga garchar por ese gran danés que está atado en la puerta?”
- “No le entiendo”
- “Eso sería una locura”
- “No, no le alcanza”
Como estaba demasiado caro, no compré.
Siete: No pude llevar pascualina, porque en la guía había sólo pascuales, y eran pocos. Yo supongo que mi madre es un poco lesbiana.
Ocho: El medio kilo de pan lo compré sin chistar. (chistar, un amigo, me esperó afuera del local)
Nueve: La Pepsi es una bebida sabor cola (ugh!), es una gaseosa, eso quiere decir que es gasificada, eso quiere decir que lleva gas (suena boludo, pero tengo un motivo para pensar eso), estamos en crisis energética, el gas genera energía, hay que ahorrar energía, hay que ahorrar gas, no hay que comprar gasesosa. (Y? Tremendo, no? La teoría de la relatividad en su máxima esperón)
Diez: Cebollas no había, porque la verdulería me quedaba re lejos (je).
Así fue que salí del supermercado, y llegué a mi casa con 2 leches, 1 jabón ODEX y medio kilo de pan.
De más está decir que me comí la puteada del siglo, pero tengo la conciencia tranquila porque sé que soy más pensante que el resto de los compradores del súper.
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